El AS Mónaco atraviesa uno de sus momentos más delicados de la temporada y recibe nada menos que al PSG, vigente campeón y actual líder de la Ligue 1. El conjunto dirigido por Sébastien Pocognoli ha tenido un noviembre para el olvido: tres derrotas consecutivas en liga —incluyendo dos caídas por 4-1— lo han sacado de los puestos de privilegio y lo han dejado al borde de una cuarta caída seguida, algo que no ocurre desde 2018. La fragilidad defensiva y la falta de contundencia en casa han complicado el panorama de un equipo que solo ha marcado dos goles en sus últimos cuatro partidos en el Principado.
A nivel internacional, el panorama tampoco ha sido alentador. Aunque Mónaco logró rescatar un 2-2 ante Pafos en la Champions League, lo hizo desperdiciando dos veces la ventaja, un síntoma claro de la falta de solidez y convicción que arrastra el plantel. En este contexto, el partido ante el PSG aparece como una verdadera prueba de fuego para un conjunto que necesita reencontrarse con su identidad, mejorar atrás y confiar nuevamente en su capacidad de competir ante los grandes.
Del otro lado, el PSG llega en un estado completamente opuesto: pleno de confianza, goles y resultados. Los dirigidos por Luis Enrique suman tres victorias consecutivas fuera de casa marcando más de tres goles en cada una, una racha que evidencia su poder ofensivo y su capacidad de liquidar partidos en campo ajeno. Su más reciente actuación, un espectacular 5-3 ante el Tottenham en Champions, mostró a un equipo resiliente, capaz de remontar desventajas y de mantener un ritmo demoledor.
Los parisinos no solo lideran la liga con autoridad, sino que también han igualado ya su número total de porterías a cero de la campaña anterior, demostrando un equilibrio que pocas veces han mostrado en años recientes. Además, el PSG ha marcado primero en 12 de sus 13 partidos de liga, un dato que habla de su capacidad para imponer condiciones desde el inicio. Y cuando juegan fuera de casa, la fiesta suele estar garantizada: en cinco de sus últimos seis compromisos como visitante, ambos equipos han marcado, lo que refuerza la expectativa de un duelo abierto y lleno de ocasiones.
La historia reciente, sin embargo, ofrece un pequeño respiro para Mónaco. Con 45 victorias históricas en Ligue 1 ante el PSG, los monegascos son el rival que más veces ha logrado frenar al gigante parisino. Aunque no han ganado en los últimos cuatro enfrentamientos directos, estos duelos suelen ser intensos y con muchos goles: cuatro de los últimos seis partidos del Mónaco terminaron con más de 3.5 tantos, y en solo uno de sus últimos siete encuentros llegaron 0-0 al descanso.
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